Le falsificaron la firma a Diego Maradona
Un peritaje caligráfico determinó que la rúbrica no pertenecía al Diez.
Viernes, 22 de enero de 2021
Un peritaje caligráfico determinó que es falsa la firma de Diego Maradona con la que se solicitó a la Clínica Olivos su historia clínica en septiembre de 2020, por lo que la situación del médico neurocirujano Leopoldo Luque quedó más comprometida, informaron hoy fuentes judiciales.
Los expertos en caligrafía de San Isidro determinaron que la firma de Maradona en uno de los papeles que tenía en su poder el médico Leopoldo Luque no era auténtica y fue falsificada.
La revelación podría complicar la situación judicial del neurocirujano, que está involucrado en el expediente que investiga el posible homicidio culposo de Maradona por impericia o negligencia médica.
Se trata de documentación que había sido encontrada en los allanamientos que se realizaron en la clínica y la casa del médico Luque.
En particular la Justicia verificó la falsedad de la firma de Maradona en el papel con el que se solicitó a la Clínica Olivos su historia clínica, en septiembre de 2020.
Una de esas hojas era una solicitud para que se entregue la historia clínica de Maradona, con fecha 1 de septiembre, y estaba dirigida a la Jefatura Archivo de la Clínica Olivos, y al pie figuraba la firma del "Diez".
La firma de la sospecha
“De mi mayor consideración yo, Diego Armando Maradona, me dirijo a usted para solicitar entregue a mi médico personal Dr. Leopoldo Luque, copia de mi historia clínica. Desde ya, muchas gracias”, dice el texto del escrito presentado en ese sanatorio privado.
Los investigadores estaban convencidos que tanto esa firma, como las que figuraban en otras dos hojas que fueron secuestradas y que se cree que eran garabatos que se hicieron mientras practicaban las firmas, eran falsas y que fueron realizadas por el neurocirujano sin el consentimiento de Maradona.
Fuentes judiciales aseguraron a Télam que los expertos caligráficos de la Asesoría Pericial confirmaron esas sospechas.
Ahora, el equipo de fiscales creado por decisión del fiscal general de San Isidro, John Broyad, y constituido por él y por Patricio Ferrari, Cosme Iribarren y Laura Capra, analizan si imputan a Luque por el delito de "uso de documento privado adulterado".
Maradona, la mayor figura de la historia del fútbol mundial, murió a los 60 años el 25 de noviembre de 2020 al mediodía, en una casa que su familia había alquilado en el barrio privado San Andrés, de Tigre, a dos semanas de su externación de la Clínica Olivos, donde había sido sometido a una neurocirugía por un hematoma subdural en el cerebro.
La sombra de la mala práxis
La autopsia determinó que murió como consecuencia de un "edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada" y descubrieron en su corazón una "miocardiopatía dilatada".
En paralelo a la pericia caligráfica el equipo de fiscales de San Isidro está abocado a extraer, mediante téncinas tecnológicas, la información contenida en los teléfonos de los principales sospechados: Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov.
En el expediente ya constan mensajes de WhatAapp entre los profesionales y allegados al Diez, audios de Maradona y mensajes de un grupo que tenían aquellos encargados de la salud del crack argentino. Se trata de información sensible para determinar si hubo responsabildiad penal en el deceso.
La investigación apunta a la que será una prueba que peude signicar un punto de quiebre de la causa: la definición de la junta médica del caso para determinar si existió o no una mala praxis que llevó a Maradona a la muerte.