El Senado aprobó el aumento en las jubilaciones

El Gobierno tuvo hoy su tercera derrota legislativa de la semana con la aprobación del proyecto que aumenta las jubilaciones y pensiones, que ya tenía media sanción en Diputados.

El bloque de la UCR, el PRO y otros dialoguistas del Senado que intentaron negociar con el oficialismo una alternativa para que el presidente Javier Milei no tenga que vetarlo, terminaron por apoyar la media sanción y llegaron a los dos tercios de mayoría.

Legisladores a favor y en contra

La aprobación fue por 61 votos afirmativos, 8 negativos y 2 abstenciones. Los que votaron en contra fueron los libertarios Bartolomé Abdala, Carmen Álvarez Ivero, Vilma Bedia, Vruno Olivera, Juan Carlos Pagotto, Francisco Paoltroni y, la única del PRO, Carmen Álvarez Rivera. 

Las abstenciones fueron de los ausentes: el radical Maximiliano Abad -que afirmaba que iba a votar a favor-, y Alejandra Vigo, de Unidad Federal.

Antes de que comience el debate por la movilidad jubilatoria, algunos dialoguistas intentaron volver a negociar cambios, tras posponer la sesión una semana.

Se retiraron del recinto

Llamaron a un cuarto intermedio y quisieron que la vicepresidenta Victoria Villarruel se sume a las conversaciones de último momento -el que venía liderando el acuerdo era Ezequiel Atauche, presidente de la comisión de Presupuesto (LLA)-, pero el clima de derrota no ayudó y no solamente Villarruel no quiso participar de la derrota, sino que el mismo jefe de bloque radical, Eduardo Vischi, abortó la misión.

Como contó BAE Negocios, ya ayer se preveía que la media sanción iba a tener éxito. Lo que no se creía era que iban a llegar a los dos tercios de mayoría.

En Diputados ocurrió lo mismo, y en el caso de que Milei vete el proyecto, con los dos tercios de ambas Cámaras, podrán revivirlo. A esto se le suma que los puentes del Gobierno con los diputados dialoguistas quedaron destruídos esta semana, con la aprobación -también por más de dos tercios- del rechazo del DNU que le aumentó el presupuesto para fondos reservados a la SIDE.

Que quería el gobierno

Lo que quería el Gobierno era dejar afuera del proyecto tres artículos: el 2, que le garantizaba a los haberes mínimos un piso por sobre el 1,09% de la Canasta Básica Total por adulto, el 4, que planteaba además una variación anual por el Remunación Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) -que sería del 50% por sobre la inflación del último año-, y el 10, que instaba a que el Ejecutivo cancele la deuda de las 13 cajas previsionales de las provincias que no le transfirieron al Estado Nacional.

Todos aspectos que atentaban directamente contra las metas fiscales de la administración libertaria.

En cambio, lo que Casa Rosada estaban dispuestos a mantener es la recomposición del 8,1% y la actualización mensual por IPC -que igualmente ya estaba contemplado en el DNU de marzo, pero así se fijaría por ley-. Esto fue lo que intentó negociar, pero no convenció que el Gobierno no estuviera dispuesto a que ese empalme no sea retroactivo a enero, como idearon originalmente.

Tiembla el superávit

Según pudo saber este diario, un miembro de la mesa chica del Presidente había conversado con los gobernadores y reprochó que era inviable para la billetera de Milei cancelar las deudas previsionales de las provincias y al mismo tiempo recompensar lo perdido de los haberes desde enero.

Los funcionarios que visitaron las comisiones hace semanas atrás advirtieron que el proyecto atentaba directamente contra el superávit fiscal, así como también alegan que el aumento del 0,43% del PBI -que estimpula un informe de la OPC- sería solo por este año y que la variaciones a futuro son impredescibles en términos presupuestarios.

Aunque los "dialoguistas" votaron a favor de la media sanción, lo que intentaron es rechazar los tres puntos que el Gobierno quería dejar afuera, en la votación en particular. De esta manera, no quedaban marcados como los que votaron en contra de aumentar las jubilaciones, pero colaboraban con el pedido del Ejecutivo.

De todos modos, no llegaron a la mayoría requerida para rechazarlos y la media sanción se aprobó tal cual vino de Diputados, también con 2/3 de los votos en particular.

"Compañera" Villarruel

Villarruel, a sabiendas del resultado, se retiró del recinto para la votación para no ser la cara del fracaso. Lo hizo después de mantener un ida y vuelta entre risas con el jefe de bloque de UxP, José Mayans, quien la llamó "compañera".

Fuente: BAE Negocios