182 millones de bolsas plásticas son arrojadas a las calles
A partir del 1 de marzo se termina la entrega en los súper de la capital.
Sábado, 18 de febrero de 2017
La ciudad de Santa Fe genera anualmente más de 270 millones de bolsas plásticas, de las cuales unos 182 millones son arrojadas a las calles. Por su escaso nivel de degradación y su alto grado de contaminación genera un grave problema ambiental de contaminación que se suma a los inconvenientes de obstrucción del sistema de desagües pluviales.
A partir de esta situación, el Gobierno de la Ciudad estableció una estrategia a fin de reducir la entrega de bolsas plásticas tradicionales no biodegradables; y su reemplazo por medios alternativos y amigables con el medio ambiente. Esto incluyó la sanción de la Ordenanza N° 11601 desde la cual se planteó el desarrollo de actividades de promoción y educación ciudadana, como así también el trabajo conjunto y consensuado con instituciones, centros comerciales, supermercados y asociaciones locales.
En este marco, funcionarios del municipio mantuvieron una reunión con representantes de la Cámara de Supermercadistas, del Centro Comercial de Santa Fe y de asociaciones comerciales. En ella se brindaron detalles de la campaña para eliminar el uso de bolsas plásticas en la ciudad, a partir de la Ordenanza N° 12303 que establece como plazo definitivo para su uso el mes de marzo de 2017.
CAMIBIO DE HÁBITO
Tras el encuentro, que tuvo lugar en la sede del Centro Comercial, el subsecretario de Comercio del Gobierno de la Ciudad, Matías Schmüth, valoró la predisposición de los comerciantes y supermercadistas. "Ellos participaron en todo este proceso que empezó en 2009, y están de acuerdo con esta medida que se va a implementar a partir de marzo. Realmente encontramos mucho apoyo, en esto que significa todo un cambio cultural", señaló.
En este sentido, explicó los alcances de la campaña que se comenzará a implementar en los próximos días, informando a la ciudadanía sobre la ordenanza que prohíbe el uso de bolsas camisetas derivadas del petróleo y las formas de reemplazarlo.
"Lo que buscamos es que el vecino comprenda el daño ambiental que produce el uso de las bolsas plásticas, como así también el riesgo hídrico en una ciudad como la nuestra. Por eso la idea es generar un cambio de hábito, a través de la reutilización de bolsas y fomentar la utilización de otros medios como el changuito, la bolsa de tela o el bolso de red para las compras”, detalló el funcionario.
SE TERMINAN
Asimismo, destacó que "no se trata de un cambio del tipo de bolsas plásticas, de una por otra que genere menor daño ambiental, sino que lo que se busca es reducir su uso, y acostumbrarnos a ir hacer las compras con nuestra bolsa".
Cabe señalar que, si al ir hacer sus comprar un vecino no cuenta con su bolsa para transportar la mercadería, la normativa establece que a partir del 1º de marzo los supermercados y autoservicios santafesinos solo puedan entregar aquellas producidas a partir de polímeros vegetales.
CONCIENTIZACIÓN
La campaña de concientización sobre la eliminación del uso de bolsas plásticas del Gobierno de la Ciudad articulará mensajes en medios de comunicación, intervenciones en la calle y talleres en las escuelas entre otras acciones. "A través de los medios, redes sociales, y en los mismos comercios y centros de compra vamos informar a los vecinos sobre este cambio que se va a generar en la ciudad. Además, vamos a llevar a cabo un canje de bolsas de tela a cambio de las de plástico; pero siempre tratando de mostrar y concientizar sobre la importancia del cambio de hábito”, detalló el subsecretario de Comercio.
Asimismo, desde la Secretaría de Educación se articularán talleres y charlas en las escuelas, destinados a los más chicos con el objetivo de concientizar sobre el cambio de hábito en el propio hogar, llegando así a la familia de los más pequeños.
ESTRATEGIA
Como parte de esta estrategia, la participación de los supermercados en el fomento para el uso de bolsas reciclables reviste una importancia significativa, en virtud de que son los mayores proveedores de bolsas plásticas. "Por eso decidimos hacer esta reunión, porque son los comercios los que tienen la relación con el vecino. Desde Blas Parera, a calle San Martín, hay centros comerciales, lo cual nos ayuda a que la difusión sea mayor. Incluso los mismos supermercados se comprometieron a distribuir los materiales gráficos de la campaña. La idea es que a partir del 1º de marzo todos los santafesinos llevemos nuestra bolsa para hacer las compras”, resaltó el funcionario.
RESIDUOS Y BOLSAS
Además del cambio cultural que implica ir a hacer las compras con el changuito o el bolso, la reducción del uso de bolsas plásticas también busca que cada uno de los vecinos se haga más responsable en el tratamiento de los residuos urbanos, buscando que gestione la cantidad de elementos desechables que genera.
Hoy, por la cantidad de bolsas en uso, diariamente se sacan los residuos a la calle sin ningún tipo de control por parte de los vecinos, arrojando incluso bolsas vacías dentro de la propia basura. A partir de la medida que se implementará en los próximos días y al no entregarse más gratuitamente, llevará a un uso más racional, teniendo en cuenta que las bolsas de polímero vegetal, serán de mayor tamaño y resistencia.
Cabe señalar que desde el Gobierno de la Ciudad, se promueven acciones que apuntan a un tratamiento más eficiente de los residuos, como son la reducción y separación de la basura y la producción del compost domiciliario. Esto, junto a otras estrategias, produce una mejora sustancial de la ciudad en materia ambiental, reduciendo además el costo de deposición de los residuos y minimizando la cantidad de materiales que se derivan al Relleno Sanitario, protegiendo de esta manera el aire, el suelo y el agua.
DATOS
Los santafesinos utilizan anualmente más de 273 millones de bolsas de polietileno es decir, aproximadamente, 748.000 bolsas diarias. Se estima que cada bolsa tiene una vida útil de aproximadamente 12 minutos, tiempo luego del cual la mayor parte de ellas son desechadas sin control, y demandando más de 200 años para su degradación. En contraposición, utilizando una bolsa de tela se puede evitar el uso de 6 plásticas por semana, 24 al mes y 288 al año.
Las bolsas comunes o tradicionales, tipo camiseta, suelen ser elaboradas con distintos tipos de polímeros sintéticos, como polietilenos y polipropilenos obtenidos del petróleo que no son degradables y por consiguiente generan varios problemas ambientales, uno de ellos la obstrucción de desagües pluviales y alcantarillas. Además, se utiliza como materia prima para su confección una fuente de energía no renovable, y en su proceso de elaboración intervienen agentes altamente contaminantes.