Nieta 126: “El amor le ganó al odio”
"Se me completó la vida", dijo la joven en la sede de Abuelas de Plaza de Mayo.
Martes, 05 de diciembre de 2017
Adriana, la nieta recuperada 126, hija de Edgardo Garnier y de Violeta Graciela Ortonali, quien fue secuestrada embarazada a fines de 1976, aseguró este martes en una conferencia de prensa ofrecida en la sede de Abuelas de Plaza de Mayo, que "esta vez no pudieron" y que, con la restitución de su identidad, "el amor le ganó al odio".
"Se me completó la vida", afirmó la joven, quien dijo sentirse "plena" y celebró tener "una abuela", al pronunciar un emocionante discurso junto a la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, en la sede de la entidad.
HIJA DE DESAPARECIDOS
La joven explicó: "Me enteré que no era hija biológica de mis padres un sábado y el lunes siguiente ya estaba acá para preguntar si era hija de desaparecidos, más que nada por mi fecha de nacimiento".
Contó que le dieron turno para hacer los análisis en la Conadi y que cuatro meces más tarde la llamaron para decirle que no había habido compatibilidad con el registro.
"Seguí mi vida pensando otra historia, que me habían abandonado, por ejemplo, pero no podía tener certeza, tenía que aprender a vivir con eso. ¿Dónde iba a buscar cuarenta años más tarde?", indicó.
LA BUENA NOTICIA
Este lunes, sin embargo, la nieta recibió un nuevo llamado de la entidad.
"Me dijeron que había información que me tenían que dar personalmente y ahí sospeché, me puse muy ansiosa y una compañera de trabajo me acompañó", explicó.
FELIZ Y PLENA
La joven se mostró "feliz" y "plena" y remarcó: "Se me completó la vida. La sensación de pasar de pensar que fui abandonada, no deseada, a sentir que fui una persona muy querida, muy deseada, muy buscada, que tengo una familia hermosa y que tengo una abuela, ¡no lo puedo creer!".
A su vez, Estela de Carlotto explicó: Su familia la buscó siempre. Fueron de los primeros en hacer la denuncia en Abuelas".
SECUESTRADOS
Violeta Ortonali fue secuestrada el 14 de diciembre de 1976, con ocho meses de embarazo, contó la presienta de Abuelas.
"Edgardo buscó por todos lados a su mujer hasta que el 8 de febrero de 1977 también fue secuestrado. Su familia continuó la búsqueda y fue una de las primeras en hacer la denuncia, pero nunca hubo ningún dato concreto sobre la pareja ni el niño o niña nacida en cautiverio, hasta ahora", subrayó.
ACERCARSE A ABUELAS
La joven se acercó al Área de presentación espontánea de la sede de Abuelas para consultar por su identidad porque alguien de su entorno familiar le había dicho que no era hija biológica de la pareja que la crió.
Durante la conferencia de prensa, la joven alentó a que todas las personas que tengan dudas sobre su identidad y que hayan nacido en la década del 70 se acerquen a Abuelas.